Este perfume de comienzos del año 2009 corresponde a la tercera
fragancia de la línea Fantasy, después del primer Fantasy del 2005 y de
Midnight Fantasy del 2007. Al igual que sus antecesores esta edición
repite la misma forma de botella esférica con cristales incrustados a
modo de joyería, cambiando el color hacia un rojo oscuro y con una caja
decorada con motivos que dan una impresión infantil entre los que
destacan unicornios, antifaces, hadas, corazones y llaves musicales. Las
notas declaradas en el sitio Britney Spears Beauty son: naranja dulce,
mandarina, brotes de pomelo, flor de verbena, postre napolitano (al
parecer un flan con queso crema, caramelo, vainilla y leche condensada),
lirio stargazer (traducido literalmente como "astrónomo", es un lirio
aromático híbrido), jazmín sambac, clavo de olor, vainilla, madera de
jacarandá, sándalo y ámbar.
La partida se siente como jugo en polvo de frutales rojos, entre
guindas, cerezas y un poco de frambuesa más una sensación de azucarado
más tenue que en Midnight Fantasy y más cercano a una vainilla que a un
acaramelado. En fase media continúa con los tonos dulces pero presenta
una separación de aromas, yendo por un lado por los frutales del tipo
naranja y por otro lado a insinuaciones de florales con vainilla pero
cubiertas por un tono dulce rojo. Con los frutales a la naranja se
siente un cambio con el tiempo ya que en un comienzo se sienten
sintéticos como golosina pero que después evolucionan a un olor a
cáscara. Parece sentirse algo de jazmín como representante floral, más
como sensación limpia y de capa neutra casi sin interferir con los tonos
dulces, pasando luego a un tono cercano al frescor de postre
avainillado del clavo de olor pero sin llegar a un gormand y quedándose
en capas de mandarina. Por momentos se siente el pomelo como un aroma
escapado de las naranjas sumado a una sensación de ambarado que parece
desprenderse del dulce a la vainilla. En fase final siguen presentes las
naranjas con algunas trazas de alimonado complementado con clavo de
olor y vainilla en la misma línea. A 48 horas de probado mantiene las
mismas notas de naranja con vainilla, con una pequeña cercanía a Ma Dame
de Gaultier pero sin llegar al extremo de jarabe.
Aunque pesa sobre esta fragancia el fantasma de Midnight Fantasy que
dejó la vara demasiado alta para la línea Fantasy y que también dio la
idea que cualquier siguiente versión del perfume seguiría sobre el mismo
estilo gourmand explícito, la fragancia tiene puntos destacables en
torno a las naranjas en toda su fase media que dan un frescor aromático
bastante veraniego y sin restricciones para un uso de diario... tal vez
un aroma no tan fresco o refrescante frío como para continuar con la
idea de una ducha matinal pero sí como aroma para pasear por la ciudad.
En oficina el aroma es ligero pero con tendencia a quedarse a ras de
piel o en un rango corto, no extremadamente llamativo y con un corte
inclinado a lo informal, más de idas a salas de estudio por el estilo
joven que tiene y bordeando la idea de un Agatha Ruiz de la Prada como
aroma de descanso para intercalar entre fragancias más complejas. Como
aroma nocturno se siente algo simple dentro de lo informal, con
tendencia a quedarse en un lineal de compuestos de naranjas y sin mucho
enganche como para llamar la atención o provocar una estela aromática
que salga del promedio, por ejemplo en una pista de baile. Por el lado
romántico no es un aroma que choque o desagrade, pero tampoco aporta con
puntos especiales ni explota los tonos dulces en un estilo gourmand,
retornando a la idea de un perfume de diario. Rango de edad entre 15 y
40 años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario