Esta fragancia relativamente clásica y conocida del año 1998 tiene
detalles anecdóticos con respecto a su nombre, ya que originalmente se
llamaba "Boss" a secas (tal como sigue apareciendo en la botella y
empaque del perfume), pero como se prestaba a confusión con otro "Boss"
de comienzos de los ochenta (el "Boss Number One" de 1985) se le llamó
informalmente "Boss embotellado" o "Boss Bottled" por la publicidad de
ese entonces de masculinidad y elegancia dentro de una botella (y en
algunos lugares se le llamó "Boss #6" ya que era el sexto perfume de
hombre de la marca). Las notas declaradas en el sitio de Boss para la
fragancia son: manzana, cítricos, geranio, canela, clavos, sándalo,
vetiver, cedro y madera de olivo. La versión que probé fue la edición de
coleccionista, por la celebración del décimo aniversario de la creación
de la fragancia, que posee el mismo aroma y forma de frasco del
original pero cambia el vidrio transparente del envase por un acabado
plateado.
En partida se siente frutoso neutro, levemente cargado a la bergamota y
con un aroma que tiende al frescor acuático del Starwalker de Montblanc.
En notas medias la bergamota se mantiene presente pero en un segundo
plano, con aparición de tonos frescos de madera suave y aumento gradual
de especies suaves del tipo canela y cáscara de nuez moscada, pero
manteniendo el tono fresco al agua y en rango corto. En notas finales se
siente el olivo con un aroma que se repite de Allure Homme, similar a
una madera aromática pariente de las hojas de tabaco ochenteras e
integrado con el sándalo, más una reaparición de cítricos poco
aromáticos pero que entregan una sensación de acuático. Se sienten
también residuales de las especies, en especial de la canela que da un
tono de madera.
Aunque deja la impresión de ser una fragancia de corto rango y más de
flor de piel, la forma en que está diseñada fomenta un estilo fresco
ligero, entre salida de ducha y elegante limpio... un detalle que da
cierto grado de libertad para ser sobreaplicado. Por estructura y
composición podría haber sido un atemporal, pero la intensidad de la
fragancia y la idea de frescura que da lo perfila más como un perfume de
verano. Se siente de diario y como un elegante de oficina que aguanta
un uso formal de corbata sin ser aromáticamente denso. De noche toma
características más informales y de camisa abierta, pero para reuniones
de grupos pequeños donde el aroma pueda sentirse sin ser afectado por
los aromas ambientales. En el campo romántico sin ser un seductor se
apega a la escuela ochentera de imagen masculina en base a maderas y
tonos de tabaco, más para reuniones o citas preestablecidas que como una
fragancia conquistadora. Rango de edad entre 25 y 50 años, con algo de
inclinación al segmento de los treinta años.
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