Si bien esta fragancia fue lanzada hace un par de años, encontré que en
la mayoría de las tiendas por departamentos del sector donde vivo
promocionaban de nuevo esta fragancia como complemento a la campaña del
Black XS pour Elle, el cual sí fue lanzado este año. Algo recordaba del
XS original que había olido hace años, pero esta versión Black es
completamente diferente.
Las notas de cabeza tienen tintes levemente cítricos, hacia el limón
aromático, mezclado con notas metálicas breves de salvia y dejos entre
flores y maderas especiadas. La mezcla en su fase inicial no se siente
ni fresca ni del todo oriental, es como un punto medio entre ambos
extremos. En las notas medias se siente algo de canela, con trazas de
limón de la cabeza que tiende a dominar esta fase y tonos dulces algo
azucarados (una mezcla de praliné con bálsamo de tolú). Las notas de
base se sienten rápido, con maderas de ébano y pachulí mezclándose con
las notas dulces. Al día siguiente, dominan las nota de madera y al oler
por un tiempo el papel donde se aplicó la fragancia se siente algo de
limón con dulce.
Las notas de madera son aromáticas, ni densas ni frescas, y el resto de
las notas no definen una estación del año en especial... puede servir
tanto en verano como en invierno. Es una fragancia de oficina y diario,
por la madera y especies no tiene tintes románticos y aunque al final es
algo suave puede servir de noche. No se siente tradicional ni maduro,
para un rango de edad entre los 25 y 40 años.
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