Sobre el Chanel Nº5 se han contado muchas historias, entre ellas que es
la mejor fragancia de todos los tiempos o que su aroma es solo usado por
abuelitas. El mérito que tiene este perfume es haber sido el primero en
haber incorporado notas de aldehídos, que son componentes sintéticos de
aroma no muy fácil de describir, pero que oscila entre agua de florero y
sensaciones polvosas como la tierra seca que se levanta al barrer el
piso o talco. Desde su lanzamiento en 1921 su aroma ha sido imitado,
haciendo que los perfumes de tendencia aldehídica terminen siendo
asociados con una época entre los años 1940 y 1960, reforzado por la
imagen de corte antiguo de Cocó Chanel y los dichos de Marilyn Monroe
quién aseguraba que era lo único que se colocaba cuando se iba a dormir.
Para romper esta tradición, Chanel comenzó una campaña de
relanzamiento, apuntando a segmentos de edad más bajos.
En las notas de cabeza se siente bastante limón, más cargado al nerolí
al sentirse más aromático que cítrico como en un agua de verano o un
perfume refrescante. Se siente bastante fresco e incluso ligero a veces.
El aroma de aldehídos que caracteriza al Chanel Nº5 (como a talco
envejecido) es mínimo en esta fase. En notas medias, alrededor de 30 a
40 minutos después de la aplicación afloran los aldehídos como nota
dominante, sacando del primer plano al limón con nerolí. Los aldehídos
no se sienten solos y van acompañados con notas florales de rosas con
jazmín y lirios del valle. Lo curioso es que por más que la fragancia
sea antigua y las flores sean tradicionales, se siente menos vieja que
otras fragancias de la década del 60 como el Caleche de Hermès de los
años 60 y el Salvador Dalí de comienzos de los 80. No se siente denso ni
invernal. A medida que se asienta en el papel comienza a dar tonos algo
más verdes y maderosos, perdiendo flores y aumentando en vainilla. Ya
en las notas de base, comienza a dar tonos verdes más notorios, de
vetiver mezclado con iris terroso y residuos de rosas, más sándalo
fresco. Como ultimas notas, al cabo de 1 día después de aplicado, el
perfume se siente muy suave y casi como talco.
Aunque he olido la fragancia en la piel de otras personas y el aroma es
derechamente viejo, en papel el perfume se comportó bastante bien en un
estilo atemporal e incluso menos tradicional que otros perfumes. No se
sintió denso en la partida y la maduración que tuvo de cítrico aromático
a floral y luego a madera oriental fue agradable y con intensidad no
intrusiva. Aunque el hecho que sea relativamente conocido limita su uso a
nivel social en el sentido de no poder destacar con un aroma único y
diferente, solo por sus notas el perfume tiene un uso elegante clásico
de oficina y de diario, y con una estructura bastante sólida para un uso
nocturno, aunque algo estática y no alegre. Los aldehídos juegan en
contra en el uso romántico ya que se sienten algo extraños y neutros y
las flores son agradables pero tampoco aportan hacia una presencia más
sensual. Por tradición esta fragancia es usada en un rango de edad sobre
los 45 o 50 años, pero nuevamente tomando el aroma sin considerar los
años en el mercado que tiene y pensando solo en sus notas, como si fuese
un perfume nuevo, podría usarse bien en un rango entre los 35 y 60
años, tanto en verano como en invierno.

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