Este perfume del año 2009 es una reinvención de una fragancia clásica de
Chanel de 1974 llamada Cristalle, que destacaba por el uso de unas
notas alimonadas montadas sobre un floral de madreselva, jacinto y
jazmín, siendo esta última flor la que daba la estela final del perfume.
La versión Eau Verte repite la misma idea de limones con jazmín pero
reemplazando la madreselva por magnolia y rebalanceando la intensidad
del alimonado para dar un tono más veraniego. Las notas que se mencionan
a nivel general en el sitio de Chanel para esta fragancia son las
siguientes: magnolias, limones y jazmín.
La partida sigue una tendencia alimonada pero no tan fresca o natural
como otras fragancias, con insinuaciones vegetales y en un comienzo la
sensación de un extracto macerado de limones al estilo tradicional de
una casa de perfumes. Gradualmente aparecen diferentes tipo de limones,
unos con sensación de aceite artesanal como el del comienzo, algunas
sensaciones de cáscara verde y otros extractos más polvosos al talco o
al jabón. Da la idea que existen flores acompañando a los cítricos, algo
tenues y con dejo frutal... posiblemente una rosa dulce. En fase media
los limones presentan una segunda veta más aromática ampliándose por un
lado hacia bergamotas y arrastrando un aroma que parecen tallos verdes
de plantas, y por otro lado se va hacia el saborizante de limón dulce,
como el usado en gaseosas de limón del tipo Sprite. Al seguir oliendo el
limón por un buen rato se sienten notas florales puras tipo jardín y
algo diluidas, bastante tenues y con un dejo entre pétalos polvosos y
savia. El aroma a savia parece sucio, entre un especiado de rosas,
pétalos machacados o ralladura de limón pero de la zona amarga blanca
bajo la cáscara. Al cabo de unas 4 hora de aplicado el tono cítrico
sufre una pausa y desaparece momentáneamente, posiblemente por
saturación, dejando una mezcla floral difícil de definir donde una nota
de la mezcla da un punto medianamente amargo, probablemente la magnolia
declarada. Se sienten insinuaciones de jazmín, casi como sensación de
base limpia y no en forma clara como un floral o un jabonoso. La fase
final tiende a ser baja en intensidad, como un apagado simultaneo de
casi todas las notas aromáticas quedando un jazmín floral no tan clásico
de fondo principal acompañado de trazas vegetales verdes indefinidas y
un tono de limón de gaseosa muy leve. Como residual a varios días de
aplicado, el aroma sigue como un raspado de limón verde con jazmín
también alimonado, con buena fijación a casi 1 semana de aplicado en el
papel.
Esta fragancia en particular parece agregarse a una tendencia de las
grandes casas de perfumería de lanzar una edición con características de
agua de colonia (como Versace con su Versense, Hermès con su colección
Eau de Pamplemousse Rose y Eau de Gentiane Blanche, e incluso Kenzo con
su Amour Eau de Toilette Florale) en las que destacan los limones y una
sensación de primavera. Sin embargo en este perfume la sensación de
primavera no es explícita y el limón tiene un tratamiento menos natural y
menos al agua, rebajado a un tono vegetal y acompañado de flores
tenues. En este sentido la fragancia todavía se siente con
características de diario veraniegas e incluso rondando lo cotidiano
pero sin llegar a ser un aroma relajado de exteriores o vacaciones. En
oficina cumple con las características básicas de un aroma limpio y no
intrusivo, partiendo suave al comienzo y dando un mejor desplante en los
florales de la fase media aunque sin llegar a destacar a nivel social.
Por el lado nocturno y el romántico el perfume no hace grandes aportes,
en parte por sentirse como un aroma de día y por centrarse en un estilo
más personal que social atractivo. Rango de edad entre 25 y 60 años, tal
vez más inclinado a una edad más madura sobre los 30 años.

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